Se trata del camino de acceso fase de exploración en el proyecto El Perdido, ubicado en el Malargüe Distrito Minero Occidental.
Kobrea Exploration Corp. anunció el comienzo de la construcción del camino de acceso para la primera fase de exploración en el proyecto El Perdido, ubicado en el Malargüe Distrito Minero Occidental, en otro paso para avanzar hacia la instalación del campamento de exploración y el inicio del primer programa de perforación diamantina en el sistema de pórfido de cobre, oro y molibdeno identificado en la zona.
El Perdido abarca 6.878 hectáreas dentro de una región que en los últimos años se ha consolidado como un área de alto interés para la prospección de minerales estratégicos vinculados a la transición energética. Según la compañía, el sistema mineralizado presenta un amplio halo de alteración hidrotermal de aproximadamente 2 x 2 kilómetros, con presencia de vetillas tipo stockwork, brechas hidrotermales y mineralización asociada a intrusivos cuarzodioríticos, lo que sustenta el potencial para depósitos de cobre a escala relevante.

“El inicio de la construcción del camino en El Perdido es un hito importante para Kobrea”, indicó James Hedalen, CEO de la compañía. “Este acceso permitirá realizar las primeras perforaciones en el sistema pórfido. Agradecemos a todos quienes hicieron posible llegar a esta instancia. En las próximas semanas detallaremos el programa de perforación”.
De forma paralela al avance del camino, equipos de campo iniciarán actividades de desarrollo de blancos de exploración en otros sectores del proyecto, con el objetivo de ampliar la comprensión geológica y definir nuevas áreas prioritarias para trabajos futuros.
Un nuevo movimiento inversor en Mendoza
Kobrea es una compañía canadiense orientada a la exploración de metales base. En Mendoza posee derechos de exploración sobre siete proyectos que suman más de 730 km², lo que posiciona a la región como un polo de relevancia para la industria minera vinculada al cobre y metales asociados. La empresa señala que los trabajos en El Perdido forman parte de una estrategia de largo plazo para evaluar y desarrollar recursos minerales en el suroeste de la provincia, un territorio con potencial reconocido y con creciente dinamismo en materia de inversiones.
La puesta en marcha de esta primera etapa con obras de accesibilidad constituye un indicador de avance concreto, necesario para habilitar tanto las perforaciones como la futura infraestructura de apoyo. De confirmarse el potencial del sistema pórfido, El Perdido podría incorporarse a la cartera de proyectos estratégicos que consolidan el rol de Malargüe como distrito minero en expansión, con impacto positivo en empleo, contratación de servicios especializados y desarrollo regional.